Antonio Amengual, jugador de campo del Cuida tu cabello Can Remendón, tuvo la difícil papeleta de defender la portería ante la ausencia del meta titular frente al Campos. Así como destacamos un fallo clamoroso al inicio de la segunda mitad, eso sí, sin trascendencia en el marcador, hay que reconocer media docena de intervenciones destacadas.

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¿Cómo te has visto entre palos?

Estaba muy nervioso porque hacía mucho tiempo que no jugaba de portero, pero ha ido bien. He tenido suerte porque el Campos ha chutado poco, si hubiesen llegado más a portería hubiese caído algún gol más. En la primera parte, Toni Delicado ha desviado sin querer la trayectoria de un disparo que se perdía por línea de fondo, yo estaba cayendo a la derecha y con la pierna izquierda evité el gol. La verdad es que me sorprendí a mí mismo con esta intervención, en cambio justo después de marcar el 4-1 casi me como una. Si la portería hubiese estado derecha, seguro que entra.

Afrontábais el partido con una equipo de circunstancias, después de sumar un solitario punto de seis posible y a los nueve minutos ya íbais perdiendo 0-1…

Así es, el panorama era devastador. Jugadores que son habituales no pudieron venir, entre ellos uno de los centrales, y tuvimos que echar mano de los menos habituales para suplir sus bajas. Además Kiko Pons arrastraba molestias y no tuve más remedio que ponerme los guantes. Empezamos muy pero que muy nerviosos, pero el capitán Pau Daviu cogió los galones y consiguió marcar dos goles. Con 2-1 ya nos hemos serenado y hemos comenzado a tocarla. Después ha venido el tercero y con el 4-1 ha habido fases de muy buen juego. Luego nos ha pegado una pájara, ellos lo han sabido aprovechar, han hecho dos goles y, con 4-3, no nos ha quedado otra que poner toda la carne en el asador. No hay ningún rival fácil y se demuestra cada semana, somos el vigente campeón y todos nos tienes ganas ¡Es lo que hay!

¿Has temido por la victoria?

Claro que sí, quedaban dos minutos más dos de añadido y solo teníamos un gol de ventaja. Ellos han tirado balones a la olla, pero nuestros dos centrales, Toni Delicado y Miquel Campins, han estado muy expeditivos. Hemos tenido la suerte en una jugada aislada que Pau Daviu se ha quedado solo y Pau es como un niño pequeño, no lo puedes dejar solo… (risas). El capitán ha sido el MVP del partido, ha cogido la responsabilidad cuando le tenía que coger, ha hecho el 1-1, el 2-1 y, cuando más lo necesitábamos, es una isla ahí delante, saca petróleo de cualquier cosa.